Si bien el hospital destaca por su excelencia en el diagnóstico, durante mucho tiempo no pudo afirmarse lo mismo en relación con los estándares de seguridad. En 2008, aún patrullaban guardias de seguridad para detectar e impedir incidentes en el extenso recinto. Para cumplir con su responsabilidad, el hospital se equipó con tecnología de vídeo MOBOTIX. La solución fueron cámaras MOBOTIX Q24 con vista panorámica de 360 grados para el interior y cámaras MOBOTIX DualNight M12 para obtener imágenes de alta resolución también de noche. Con el sistema descentralizado, el ancho de banda solo se utiliza cuando se producen incidentes. Gracias a la tecnología hemisférica, se necesitó un número relativamente bajo de cámaras para cubrir un área de gran tamaño. Esto, junto con la gran durabilidad de las cámaras, supone una gran ventaja económica.