En 2012, la terminal de Malpensa fue certificada como centro competente de manipulación y transporte aéreo y terrestre de mercancías, especialmente de pequeños objetos de valor, como smartphones, tabletas o prendas y accesorios de primeras marcas de moda. Desde entonces, el transporte de pasajeros también ha experimentado un crecimiento exponencial, lo que llevó al grupo Alha a instalar un sistema de videovigilancia que ofreciese la máxima protección. Para ello, recurrió a MOBOTIX, que cuenta con más de 20 años de experiencia en la fabricación de productos tecnológicos en Alemania.
"Hemos instalado nueve cámaras termográficas de MOBOTIX en nuestras instalaciones de Malpensa, Roma-Fiumicino, Segrate, Pioltello, Verona y Prato para cubrir las zonas de tránsito estratégicas" contó Marco Alesi, director de seguridad del grupo Alha.
Trium, un socio del grupo Alha, instaló los sistemas termográficos de MOBOTIX a principios marzo como respuesta a la situación de emergencia sanitaria, por lo que ahora puede controlar la entrada a las oficinas y a los almacenes de manera eficaz.
Con este proyecto, Alha creó un perímetro de seguridad virtual para proteger los paquetes de posibles robos. Un sistema de alarma por infrarrojos ayuda a proteger la zona y se activa en caso de que un intruso penetre en ella. Gracias a las imágenes en tiempo real de las cámaras, se puede detectar y detener a los visitantes indeseados de inmediato.
De este modo, Alha no solo ha conseguido un sistema de vídeo más actual, eficaz y económico, sino que también ha agilizado los procesos de trabajo cotidianos. Las cámaras de MOBOTIX están integradas en el sistema de detección de intrusos, que se desactiva mediante los documentos identificativos de seguridad correspondientes. Cada desactivación del sistema queda registrada.
"Ya estábamos encantados con las cámaras de MOBOTIX que teníamos instaladas antes", apunta Marco Alesi. "MOBOTIX es sinónimo de calidad y durabilidad, y además ofrece infinitas posibilidades de desarrollo e integración, lo que supone una enorme ventaja que también hemos tenido en cuenta en esta nueva instalación".
El sistema de registro del tiempo de trabajo dispone de una cámara termográfica que se activa durante el proceso de registro de cada empleado en el área de acceso al almacén y a la oficina. A través de un mensaje de audio, la cámara pide al empleado que mire a la cámara y que se quite las gafas o cualquier objeto que le cubra la cabeza. Si la temperatura corporal medida por la cámara no supera los 37,5 °C, se enciende una luz verde intermitente que permite la entrada a la zona de carga. En el caso contrario, se enciende una luz roja intermitente y se emite un mensaje de audio en el que se pide a la persona que espere hasta que el personal técnico le tome la temperatura.
Al mismo tiempo, el sistema envía un correo electrónico con la captura de la cámara y la fecha, la información personal guardada y la temperatura detectada. Con el sistema de interfono VoIP, el personal de seguridad de Alha se puede comunicar de inmediato con el empleado al que no se le ha permitido la entrada.
"Las medidas de control refuerzan la seguridad de todos durante esta crisis. La posibilidad de contacto inmediato que ofrece el sistema tras una prueba aparentemente positiva evidencia la importancia que damos al bienestar de nuestros trabajadores", explica Alesi.